Actualmente sigue habiendo machismo, y aunque sea algo menos evidente que antiguamente,  sigue estando presente y no solo lo relacionado con la violencia de género, que es por así decirlo, lo más evidente, sino también los micromachismos. Además, hay mucha más violencia de género de la que parece porque hay muchos casos sin denunciar. Por todo esto, el feminismo es necesario.

 

El feminismo no intenta poner a la mujer por encima del hombre, si no llegar a un estado de igualdad porque el hombre actualmente está por encima de la mujer, ya que tiene más poder y por eso se dice que la mujer está oprimida. Lo que el término pretende es darle la importancia que se merece para llegar a tener los mismos derechos que los hombres y los mismos poderes. De tal manera que no busca la superioridad de la mujer. El feminismo no es lo opuesto al machismo, porque machismo busca la superioridad del hombre sobre la mujer pero feminismo no es la superioridad de la mujer sobre el hombre, a lo que llamaríamos “hembrismo” aunque es un término que no es válido porque no existe, nunca ha existido ni existe en ningún ámbito. El hembrismo, al igual que feminazi, está mal usarlo, ya que sería comparar una lucha necesaria de un grupo de personas con el exterminio. También el feminismo es una lucha en la que no existe la sororidad que es como la unión entre todas las mujeres y ese sentimiento de intentar ayudar a las demás.

 

Es importante dejar constancia de que el feminismo no es una lucha de una persona: yo no soy feminista porque yo sea oprimida, que también, sino porque todas las mujeres son oprimidas. Yo lucho por las demás mujeres a pesar de que yo nunca he sido violada y nunca he vivido una situación tan impactante, pero todos los días las mujeres sufren machismo. Todas las mujeres han sufrido muchas veces en su vida machismo.

 

Un ejemplo, es el papel de la mujer en  África, donde hay un potencial de mujeres que mantienen a sus familias, a sus comunidades, que son la base de la convivencia social, pero que no tienen acceso a la salud, a la educación, al conocimiento que les dará ese poder para decidir qué quieren ser ellas mismas, sus familias y sus países. Pero en estos lugares, tienen una gran importancia distintos problemas como el de desnutrición, entre otros, además de castigar el ser mujer con la mutilación genital, la ya conocida ablación.
Las escalofriantes cifras hablan de dos millones de niñas que son sometidas a esta brutal operación cada año, lo cual se traduce en 6.000 nuevos casos por día, cinco niñas por minuto.
 

Por otro lado, nos encontramos con la mujer china. En primer lugar, cabe destacar que a principios de 1995, la policía de la provincia de Shanxi, en China, rescató a más de 200 mujeres que habían sido secuestradas y vendidas como "esposas" a campesinos en las zonas rurales. De esta manera vemos cómo ya, desde el siglo pasado, ha habido quien ha intentado eliminar la necesidad de feminismo, lo cual, desgraciadamente, no tuvo éxito. Así, las mujeres debían obedecer siempre al padre y hermanos mayores.

También, como todos sabemos, en la niñez, los varones son considerados de mayor valía que las niñas.

No obstante, en los últimos años, la mujer china ha ido ganando peso en el escenario universal.

 

Por último, hablaremos de la mujer árabe, donde su discriminación empieza en el hogar: desde una edad joven, el hijo recibe la parte de los gastos, en el estatus, e incluso en la educación. Muchas familias envían a sus hijos a escuelas privadas mientras sus hijas asisten a las escuelas del estado, para que el hijo tenga una mejor educación.

También existe discriminación en el trabajo, ya que la mujer que trabaja en el mundo árabe no es nada más que una 'criada,' quién labora continuamente fuera de su casa, cocina y cría a los hijos dentro de esta.

Por último, las leyes obreras no tratan a la mujer árabe justamente, además del tratamiento racista que ella sufre en el sector del clero.

 

Como conclusión, es necesario el feminismo. Tanto los hombres como las mujeres pueden llevar a cabo la lucha para defender los derechos de la mujer y así conseguir una sociedad igualitaria.